Descripción:
Hierba anual o perenne, erecta o decumbente. Hojas alternas, estipuladas, pecioladas, limbo palmatífido o palmatipartido. Flores en fascículos axilares, hermafroditas, actinomorfas, pentámeras. Cáliz con 5 sépalos soldados y un epicaliz de tres piezas libres. Corola con pétalos de color rosa intenso, de 15 a 30 mm, soldados en la base y los filamentos estaminales, emarginados o profundamente escotados, uña pelosa. Androceo de numerosos estambres soldados por los filamentos formando un tubo estrellado pubescente. Gineceo de carpelos soldados, ovario súpero. Fruto esquizocarpo, mericarpos con dorso plano y netamente reticulado, glabros o pubescentes.
Composición:
Mucílagos de naturaleza urónica (10-15% en las flores, 8-10% en las hojas), antocianósidos (7%): malvina. Taninos. Vitaminas A, B1, B2 y C.
Uso:
Demulcente, antiinflamatorio, antitusivo, mucolítico, laxante, ligeramente diurético. Popularmente las hojas se consideran hipoglucemiante.
Formas galénicas/posología:
Uso interno:
Infusión: una cucharada de postre por taza. Hervir dos minutos e infundir durante diez. Cuatro o más tomas al día.
Extracto fluido (1:1) estabilizado: una cucharadita de café, dos o tres veces al día.
Jarabe (5% de extracto fluido): 1-3 cucharadas al día.
Uso externo:
Decocción: 30-50 g/l. hervir durante 15 minutos. Aplicar en forma de lavados, baños oculares (isotonizar), colutorios, gargarismos, irrigaciones vaginales, enteroclismas, etc.
Cataplasma caliente de hojas de malva con harina de lino en abscesos y forúnculos.
Jugo de planta fresca, contra la picadura de insectos.