Descripción:
Tiene tallos erectos o postrados, generalmente cuadrangulares, algunas veces teretes, glabros o con varios tipos de pelosidad, algunas veces glandulares. Hojas opuestas, frecuentemente decusadas, rara vez verticiladas, simples, dentadas, aserradas, lobadas o incisas, rara vez enteras. Inflorescencias terminales o terminales y axilares, en espigas solitarias, algunas veces con apariencia paniculada o cimosa, las espigas densas, laxas, cortas y con apariencia de cabezuela o alargadas; flores generalmente sésiles, de varios colores, inconspicuas a vistosas; brácteas inconspicuas; cáliz tubular, con 5 costillas terminando en 5 dientes desiguales, frecuentemente conniventes en fruto
Composición:
Mucílagos, glucósidos, aceite esencial, ácido silícico, ácido cafeico, taninos.
Uso:
Se utilizan para combatir problemas de insomnio, ansiedad o incluso para mejorar la depresión. Y es que, además de sus efectos sedantes, esta planta es capaz de fortalecer el sistema nervioso y ayudar en la mejoría de dichas afecciones, alivia migrañas, dolor de cabeza, provoca efectos diuréticos.
Posología:
La dosis habitual en adultos es de tres tazas al día de infusión de verbena.
Se usa tanto a nivel interno.
A modo de infusión o tisana.
Como en uso externo,
Mediante cataplasmas y aceites.